Música en los balcones, Música en las aulas

En tiempos de Coronavirus el mundo entero recurre a la Música para curarse. Para aliviar el confinamiento y el estrés, para sentirnos más humanos. Que no se nos olvide que en algunas  aulas españolas acortaban horas lectivas de Música como asignatura.  Es para reflexionar.

 

Asómate al balcón y ve a tu vecino cantar, poner una canción o tocar un instrumento. Observa a familias juntas descargar esa energía positiva.Ese momento alivia, te hace sentir que formas parte del colectivo, que puedes aportar algo, que hay esperanza en mejorar.

Compartes ese vídeo a tus contactos y después de la marabunta de mensajes entorno a la pandemia puedes relajarte porque te identificas con lo que ves y ya no con el miedo.

Se produce un halo de creatividad gigantesco. Ayer mismo me manda un mensaje una conocida mía:

 

– “Oye Yvette, voy a desenfundar la flauta, subirme a la terraza y tocar junto a mis hijos. ¡Vente!”
– “Vale, va… yo también. Y eso que mi oboe no va cara al aire.”

Y así conjuntamente en toda esta situación confusa, sacamos lo mejor de cada uno de nosotros y nosotras, dando el mejor de los ejemplos. El de mostrar humanidad sacándola al balcón.

La Música, provoca esto. ¿No os parece importante?

Me parece sumamente irónico que semanas anteriores eliminaran del currículo educativo horas de enseñanza musical en detrimento de otras materias.Ahora es momento en el que cuando todo pase recordemos el valor significativo real de la Educación Musical. De la Música como eje integrador y sus beneficios en el aula.

 

Acordaos de la típica preguntita de siempre:

“ ¿Para qué sirve tocar la flauta…,o aprender notación, o tocar en grupo?”

 

Ahora mismo puede que haya un niño o una niña tocando en el balcón el Himno de la Alegría de Beethoven después de haberse aprendido la partitura, siendo escuchado o escuchada por sus vecinos, intentando ir a compás con su familia o con el del balcón de al lado…

y eso, señores gobernantes tiene un valor incalculable.

Salid al balcón y lo veréis.

Tomad nota, y no la déis.

 

Yvette Delhom López

Creadora y Orientadora Metodológica Batucado